LÍNUS Y SU MANTITA

TEORÍAS DE LA PERSONALIDAD

Por Cinthya Trejo

 

Linus Van Pelt, tiene 4 años, es un personaje de la serie Charlie Brown quien a pesar de su corta edad, es bastante inteligente, se considera a sí mismo como un filósofo y teólogo. Es el hermano  de Lucy (hermana mayor).

Él  inventó su propio ser cuasi-religioso, que  misterioso aparece cada año trayendo presentes, La gran calabaza, sin embargo, cuando llega Hallowen no aparece pero él sigue creyendo devotamente en ella. Linus es el único quién cree en la gran calabaza. Aunque él convence de vez en cuando otros de que  la gran calabaza es verdadera, ellos pierden siempre la fe, mientras que Linus nunca lo hace.

Linus casi nunca anda sin la manta azul, la cual tiende a estar sobre su hombro derecho al tiempo que se mete su pulgar a la boca. al parecer, ésta tiene algo así como una personalidad propia y la llama el la “manta de la seguridad”. Linus además parece estar condenado a que su hermana (Lucy) le quite el sitio delante de la televisión. Vive atormentado por ella y generalmente es blanco de sus amarguras y sus desquites más agresivos.

Ahora bien después de describir un poco al personaje me enfocare en una de sus características principales  “su mantita”   y más específicamente en el capítulo de la serie llamado “Linus y su mantita” , cabe aclarar que él durante todos los capítulos de la serie saldrá con su manta al hombro sin dejarla un momento, pero en este capítulo en especial pasa algo inesperado, ya que intenta con todas sus fuerzas dejar de lado su manta y continuar su vida sin ella , ya que su hermana lo critica y le dice que la deje de una vez, en el momento que ella se o dice ella se asusta por la presencia de una abeja y él le dice que él no tiene miedo obviamente  porque aquí podemos ver el significado de esa manta , ya que en ese momento la trae y se siente seguro y sin miedo. Pero cuando se da cuenta que su manta no está, la busca y esta recién lavada por su hermana cosa que no le es muy grata y le pregunta desesperadamente donde está su mantita, ella se la devuelve y el dice – y dicen que los niños de antes lo pasaban mal- con lo que demuestra que no había cosa peor que aquello que le estaba pasando,  pero en ese momento es cuando reflexiona y recuerda lo que su hermana le dijo acerca de la manta entonces decide dejarla. en este capítulo entonces apreciamos que para él la mantita representa un objeto transicional obviamente muy importante para él , y un símbolo de seguridad que el mismo ha dado a su manta ya que sin ella se siente vacio, con una vida arruinada, al parecer ansioso y obviamente inseguro, durante el capitulo el intenta que otros niños al igual que él dejen su manta  (mejor dicho su objeto transicional: objeto que  le sirve como consuelo y como elemento que le proporciona seguridad y tranquilidad,  permite al niño efectuar como ya lo mencionamos la transición entre la primera relación oral con la madre y la verdadera relación de objeto)  pero nadie va en su ayuda ya que ninguno quiere hacerlo, y su amiga lo visita con una manta en la cabeza pidiendo su consejo acerca de cómo el dejo su manta, e incluso bromea acerca de que tiene algunos peluches bajo la manta que tampoco dejará (supuestamente sus otros objetos transicionales) todo esto con el único objetivo de mofarse de él ,  ya que al final solo se quita la manta y se burla de Linus, posteriormente una vez que Linus cree superado la etapa de la mantita, la vuelve a recuperar, y su hermana dice que debe de encontrar una forma de que se deshaga de ella entonces Snoopy se va con la manta al desierto (ya que su hermana Lucy se la dio) y bastante angustiado y con pocas ilusiones Linus  comienza a darse  cuenta de cuánto la necesita en realidad , al regreso de Snoopy ,solo pregunta por su mantita y cuando por fin la tiene a su lado toda llena de espinas ( lo cual no le impide tomarla) la vuelve a  poner en  su hombro y vuelve a chuparse el pulgar (fenómenos transicionales),  recobrando su estabilidad. En este momento Snoopy trata de quitársela y el la agarra con tanta fuerza que no le es posible a Snoopy y su hermana le insiste que renuncie a ella  y con un gran grito Linus dice – nunca, nunca, nunca!-.

Ahora bien aquí podemos notar que Linus es claro ejemplo de lo que expone Winnicott en su teoría de desarrollo emocional,  al ser su manta y su dedo (succión de este) por así decirlo tan importantes en su personaje, esta teoría dice básicamente que  durante el primer año de vida, la diada madre-infante constituyen una unidad ella es el primer entorno del infante. Todo recién nacido sano tiene una tendencia innata a desarrollarse como una persona total y creadora, ha de poseer sin embargo un entorno inicial como base para tal desarrollo. La madre en un principio debe ilusionar al bebe para desilusionarlo gradualmente, esto quiere decir que el bebé, ante su necesidad de comer, es acogido por la madre y le ofrece su pecho para alimentarlo, situación donde el lactante tiene la ilusión de que el pecho fue creado por él y que es parte de él.

Pero a medida que la madre lo desilusiona, el bebé va percibiendo que no es uno con la madre, disponiéndose a entrar en contacto gradualmente con la realidad y su subjetividad.

En este sentido el cuidado materno-parental satisfactorio puede dividirse en tres etapas

  • sostén o holding
  • el self verdadero o falso
  • objeto transicional

Para Freud la base de los conflictos humanos es la lucha entre las pulsiones y la cultura, entre el  ello yo y superyó, Winnicott en esta teoría plantea que dichos conflictos se inician en el vinculo del recién nacido con su madre y del estado emocional de ella. De ahí la importancia que le da a la relación que lleva el niño con su madre, y sobre todo a la calidad de respuesta (cuidado materno) que esta le da al infante.

Enfocándonos más en  la situación de nuestro capítulo, hablemos entonces de la tercera etapa con más detalle, etapa del objeto transicional:

Este objeto es una herramienta en la que el niño consigue luego de asimilara la existencia de un no-yo, separa a su madre del entorno y por ende, separarse de ella, es en este momento en el que entran en juego los objetos transicionales, que fomentan y ayudan el desapego y separación respecto a la madre, consiguiendo que el niño desarrolle ese apego hacia el objeto que en un momento dado, se conformara como su madre. De esta manera, representan el espacio que el bebé necesita para renunciar a la posesión omnipotente de su progenitora, conservando algo de la seguridad que ésta le proporciona.

El objeto transicional, tiene tres significados: la identificación del no – yo, el enfrentamiento de la ansiedad de separación  y conformar el espacio de la ilusión. en el mismo orden se trata de un proceso evolutivo del juicio de realidad; una defensa particular  y en el último caso una relación objetal.

Este objeto material posee un valor electivo para el lactante y el niño pequeño especialmente en el momento de dormirse. El recurrir a objetos de este tipo constituye, un fenómeno normal que permite al niño efectuar como ya lo mencionamos la transición entre la primera relación oral con la madre y la verdadera relación de objeto.



 

 

Para que se produzca la continuidad de esta experiencia transicional, el objeto «seleccionado» debe cumplir una serie de características que Winnicott resume como sigue:

  • El bebé adquiere derechos sobre el objeto, y el mundo exterior los acepta. Sin embargo, esta adquisición representa al mismo tiempo una cierta renuncia a la omnipotencia simbiótica;

– El objeto es amado y acunado, pero también mutilado con excitación;

– Se le atribuye cierta vitalidad, como si tuviera vida propia;

– Nunca debe cambiar (por ejemplo ser lavado) a menos que el bebé lo haga;

  • Su catexia afectiva sufre una descarga gradual.

 

Lo esencial de las ideas de Winnicott acerca del objeto transicional se encuentra en un artículo titulado objetos transicionales y fenómenos transicionales (transitional objeas and transitional phenomena, 1953). Él nos dice:

Linus y su mantita

1.° En el plano de la descripción clínica, el autor pone de manifiesto un comportamiento frecuentemente observado en el niño y lo denomina relación con el objeto transicional. Es frecuente ver al niño, aficionarse a un objeto particular, como un pedazo de lana, el ángulo de un cubrecama o de un edredón, etc., este objeto transicional conserva su valor durante mucho tiempo, antes de perderlo progresivamente; también puede reaparecer más tarde, sobre todo cuando se aproxima una fase de depresión. (aquí cabe destacar que Linus tiene 4 años de edad).

Winnicott clasifica dentro de este grupo ciertos gestos y diversas actividades bucales (por ejemplo, gorjeos) que denomina fenómenos transicionales.

 

2.° Desde el punto de vista genético, el objeto transicional se sitúa entre el pulgar y el oso felpudo. En efecto, si bien constituye una parte casi inseparable del niño, diferenciándose así del futuro juguete, es también la primera posesión de algo que es no yo. Desde el punto de vista libidinal, la actividad sigue siendo de tipo oral, lo que varía es la posición del objeto, en la primera actividad oral (relación con el pecho) existe lo que Winnicott denomina una creatividad primaria: este pecho es constantemente recreado por el niño en virtud de su capacidad de amor o, por así decirlo, en virtud de su necesidad. La madre sitúa el pecho real en el lugar mismo en que el niño está dispuesto a crearlo y en el momento adecuado. Más tarde funcionará la prueba de realidad. Entre estos dos tiempos se sitúa la relación con el objeto transicional, que se halla a mitad de camino entre lo subjetivo y lo objetivo: desde nuestro punto de vista, el objeto viene del exterior: pero el niño no lo concibe así.

 

3.° El objeto transicional, si bien constituye un momento de paso hacia la percepción de un objeto netamente diferenciado del sujeto y hacia una relación de objeto propiamente dicha, no ve, sin embargo, su función totalmente abolida al continuar el desarrollo del individuo. El objeto transicional y el fenómeno transicional proporcionan, desde un principio, a todo ser humano algo que seguirá siendo siempre importante para él, a saber, un campo neutro de experiencia que no será puesto en duda. Pertenecen, según Winnicott, al terreno de la ilusión: este campo intermedio de experiencia, del cual no necesita justificar la pertenencia a la realidad interior ni a la realidad exterior (y compartida), constituye la parte más importante de la experiencia del niño. Se prolongará, a lo largo de toda la vida, en la experiencia intensa que corresponde a la esfera de las artes, de la religión, de la vida imaginativa, de la creación científica.

 

Los términos objeto transicional y fenómeno transicional (pensamientos o fantasías se enlazan con estas experiencias a todas estas situaciones Winnicott las llama fenómenos transicionales)  designan la zona intermedia de la experiencia,  entre el pulgar y el osito de peluche (en este caso la mantita de Linus), entre el erotismo oral y la verdadera  relación objetal, entre la actividad creadora primaria y la proyección  de lo que ha sido introyectado entre la inconsciencia primaria de la deuda y el reconocimiento de la deuda.

La pauta de los fenómenos transicionales empieza para Winnicott en un período variable que va desde los cuatro a seis meses hasta los ocho a doce. Como se puede apreciar, su aparición corresponde aproximadamente al estadio del objeto precursor de Spitz y a la etapa de simbiosis de Mahler.

Una vez ya expuesta la teoría sobre los objetos trasnacionales, regresemos de nuevo al caso de Linus, para dar una conclusión sobre todo esto, aquí en el capitulo, podemos  ver a un niño de 4 años que aun succiona su dedo para sentir alivio, calmar su necesidad y satisfacer sus instintos esto se puede ver como uno de los dos grupos que Winnicott plantea, a continuación pondré los detalles:

Según Winnicott suele considerarse (como primer objeto “no yo” el pecho.)

Y plantea que hay dos grupos de fenómenos:

1) Niños recién nacidos utilizan puños, dedos pulgares para estimular la zona erógena oral, para satisfacer los instintos de dicha zona y lograr una tranquila unión.

2) A los pocos meses los niños, de ambos sexos, juegan con muñecos que las madres le dan o algún objeto especial en espera que se conviertan en adictos a tal objeto. Winnicott hace referencia a los  juguetes que los niños reciben de sus madres en los primeros tiempos de su vida o a cualquier objeto que pueda servir a ese medio y que está dedicado al niño, incluida su ropa de cama o aquella que se le pone

Entre 1 y 2 hay una relación y un intervalo de tiempo que las separa pero como podemos ver en este caso hay una etapa anterior a la de objeto transicional que en este caso sería la uno, en Linus, ya que él sigue succionando su pulgar y así paso a la siguiente etapa con su mantita.

Linus es un niño que tiene estas conductas transicionales y es totalmente normal que lo haga con su mantita ya que estas pueden comenzar a partir de los 4-6 meses y durar hasta los 3-4 años, que es la edad de él, cuando el niño ha adquirido mayor control de los miedos de abandono, comienza a ser más independiente e inicia su vida social. Puede que use su objeto de apego de forma continuada o que recurra a él cuando atraviese por una etapa de ansiedad como el nacimiento de un hermanito, una mudanza o la separación de los padres. Aquí su hermana Lucy intenta deshacerse de ella y hacer que el la deje pero no lo logra ya que el niño debe de estar seguro y el debe de decidir en momento adecuado, eso ya lo mencionamos como parte de la teoría.

En cualquier caso es absolutamente normal que tenga su objeto y que presente un fenómeno transicional , solo que a mi punto de vista y basándome en la teoría de Winnicott la etapa de chupar su dedo debió de ser una etapa ya cerrada y superada en su desarrollo para continuar con la siguiente , sin embargo , aquí en este episodio esta el claro ejemplo de esta teoría y como un niño lo maneja, por ejemplo, no les gusta estar lejos de su objeto, generalmente son suaves y cálidos como en este caso, pueden usarlos a su antojo es decir pueden ser objeto de su amor y también de su agresión, adoptan como en este caso un afecto especial ,es ese objeto y no otro que lo sustituya, (así Linus lo cree también ).en fin todas estas características y sentimientos que se pudieron observar se dan en la vida real con los niños de estas edades y es proceso de desarrollo por el cual todos pasamos, e incluso en la vida adulta podemos llegar a tener nuestros objetos transicionales.

GRACIAS POR LEERNOS




Compartir

DIFERENCIA ENTRE PSICOSIS Y NEUROSIS

 

DIFERENCIA ENTRE PSICOSIS Y NEUROSIS

Por Ramon Vasco V.
En su artículo Neurosis y Psicosis de l923, Freud expresa su primera teoría sobre la psicosis señalando que la neurosis es el resultado de un conflicto entre el yo y su ello, en tanto que la psicosis, es el desenlace análogo de una similar perturbación en los vínculos entre el Yo y el mundo exterior. Más tarde, en 1924 en  La Pérdida de la Realidad en la Neurosis y Psicosis, describe las siguientes diferencias entre estas dos patologías, según el accionar de la represión y la desmentida:
NEUROSIS
PSICOSIS
El yo sofoca la moción del ello (reprime) sometiéndose a la realidad.
El yo, al servicio del ello, se retira de un fragmento de la realidad (desmiente).
Hay un hiperpotencia del influjo de la realidad.
Hay una hiperpotencia del ello.
Se evita la realidad.
Hay pérdida de la realidad.
La mera represión de la moción pulsional no constituye aún la neurosis dado que, si la represión es exitosa, no hay síntoma.
La desmentida del fragmento de la realidad ya es, en sí misma, patológica porque arranca al yo de la realidad.
Si fracasa la represión en un segundo momento, entonces sí, aparece la neurosis y el nexo con la realidad se resiente, particularmente en el sector ligado a la frustración que moviliza la represión.
El segundo momento tiene el carácter de una reparación de la pérdida con una realidad nueva (a través de alucinaciones, delirios, espejismos del recuerdo).
A partir de allí el segmento conflictivo de la realidad se evita.
El fragmento conflictivo de la realidad se rechaza pero luego se lo reconstruye activamente.
No desmiente la realidad sino que la deforma o la evita.
Desmiente y procura sustituir la realidad.
La angustia neurótica se produce por retorno de lo reprimido.
La angustia psicótica se produce por retorno de lo desmentido.
El acento está en el segundo paso: el fracaso de la represión. Si la represión es exitosa no hay patología (aunque sí un incremento del gasto de energía disponible en el aparato).
El acento está en el primer paso que sí es patológico y genera enfermedad.
La neurosis se apuntala en un fragmento de la realidad, distinto de aquel que lo frustra, prestándole un sentido secreto, particular y simbólico.
En la psicosis la nueva realidad reemplaza a la realidad anterior.
Compartir

Sin título

EL DUELO Y SUS ETAPAS
Por Fernando Arrieta L.

Desde la perspectiva de Freud el duelo consiste en el proceso que se desata como reacción a una pérdida, ya sea esta de un ser amado o de una abstracción equivalente, es decir, puede ser desde la pérdida de un familiar hasta la de un concepto como el trabajo, la libertad o nuestros planes. La reacción es por si misma dolorosa y requiere un tiempo durante el cual seguirá un proceso en la cual se llevara a cabo una aceptación de la pérdida, como punto culminante del duelo. Freud habla de cerca de dos años.

En términos generales, tres son los ejes que se abordan en lo que se refiere a las etapas del duelo, el primero un acercamiento psicoanalítico dado por Freud, el segundo un acercamiento post freudiano dado por Lindermann y Schultz y el acercamiento desde la corriente evolutiva de la Dra. Kubler Ross.

Estos niveles se relacionan entre sí, y como en varios aspectos de la psicología pueden tender una red que nos permita entender mejor este proceso, finalidad que se persigue como objetivo central.

La primera etapa para Freud es el EXAMEN DE LA REALIDAD, en la que se da el primer acercamiento hacia el hecho real de la pérdida, se alinea con la primera etapa para Lindermann y Schultz, la negación, que funciona como un mecanismo defensivo natural, ante el sentimiento de tristeza ante la pérdida, poco a poco los momentos en los que se acepta la pérdida y los momentos en los que se le niega se van alternando y gradualmente comienzan a ser más los momentos en los que la ausencia del objeto se integra al nuevo esquema de la realidad. Este proceso de negación se empareja también con la teoría de Kubler Ross, quien la denomina como la primera etapa de cinco. A continuación, en esa misma teoría se presenta la ira, ante la aceptación de que el objeto se ha perdido ya, el mecanismo de defensa es la proyección, de eros y tánatos, de vida y muerte en otros objetos u abstracciones a las cuales se les culpa o recrimina de SER a diferencia del objeto que ya no ES, o de NO SER como tampoco el objeto ES.
En este paso se da pie a la siguiente etapa en las tres teorías, es decir la segunda para Freud, la aceptación de la pérdida, la segunda para Lindermannn y Schultz llamada fase aguda del duelo, y la segunda y tercera para Kubler Ross, la ira y la Negociación. En este punto lo que tienen en común las etapas, es el enojo ante los objetos sobre los que se proyectan las dos pulsiones mas básicas, eros y tánatos, y la tristeza ante una ya aceptada perdida de el objeto original, la sobrecarga de recuerdos y pensamientos sobre ese objeto da poco a poco la oportunidad de negociar o retrasar el efecto de la perdida mas ya no la perdida en si, el desligamiento libidinal del objeto es paulatino y mientras se da las actividades propias pierden interés, la carga psicológica esta dedicada al desligamiento de la relación objetal ambivalente con el objeto perdido, esto da pie a un proceso de identificación que permitirá que el duelo siga avanzando, hacia siguientes etapas.

Posteriormente, se entre en la tercera fase de Freud, la Identificación con el Objeto Perdido, y la depresión para Kubler Ross, sin avanzar aun a la última etapa para Lindermann y Schultz. En este punto la identificación permite una escisión al objeto perdido, quien sufrió la perdida comienza a ver elementos que lo perdido dejo en él, en este momento hay un reacomodo de la identidad del sujeto, y es un proceso que genera estados depresivos, sin embargo la identificación incluso para el mismo Freud no parecía ser el objetivo final de esta etapa, sino mas bien la posibilidad de que el sujeto tome una decisión de pasar a la siguiente, mas allá de la identificación se encuentra entonces la voluntad de identificarse o no con el objeto perdido, de vivir o seguir pese a la perdida o no, como punto crucial de esta etapa. Pareciera en ambos autores (Freud y Kubler) un momento en el que el duelo puede estancarse o avanzar.
Finalmente, se da gracias a la etapa anterior el paso a la etapa final en las tres teorías, Sustitución o Reconexión Objetal para Freud, Resolución del Duelo para Lindermann y Schultz y Aceptación para Kubler Ross. En esta etapa quien sufrió la perdida reconecta los cables sueltos por así decirlo, cargando los sentimientos y pulsiones hacia todos los puntos en los que repartió anteriormente al objeto, hacia si mismo con la identificación, hacia otros con la ira o hacia el mismo objeto con la identificación y la escisión objetal de las etapas anteriores. Al realizar esto el sujeto sustituye lo perdido con una idea, o una serie de ideas que le permitirán resolver la perdida y aceptarla ya integrada a su realidad como algo que le ha de provocar una identificación, y a través de la cual, como los cimientos de una ciudad nueva, tras las ruinas de la ciudad vieja, erigirá una restructuración de su ser reconectándose con la realidad, una realidad ya sin el objeto perdido.

Compartir